En el último capítulo de Game of Thrones se desveló uno de los misterios que llevaban dando vueltas por la serie desde la primera temporada o, en su caso, desde el primer libro. Os vamos a contar todos los detalles a continuación, por lo que la información es spoiler si no has acabado la sexta temporada de la serie.
Durante mucho tiempo había una teoría que mantenían todos los fans: que Jon Snow no era hijo de Ned, sino su sobrino. Hijo de Rhaegal Targaryen y Lyanna Stark. Efectivamente, en el último capítulo, Bran ve como Lyanna da a luz a Jon y se lo entrega a su hermano. Si ella le pide que lo esconda del mundo es por miedo de que Robert Baratheon lo mate por venganza.
Pues bien, George R.R. Martin ya habló de esta historia en 2002, durante una sesión de preguntas y respuestas, se le preguntó que quién les había puesto el nombre a Jon Snow, Daenerys Targaryen y Tyrion Lannister, puesto que sus madres habían muerto dándoles a luz. El escritor respondió que las madres podían darle nombre al niño antes de nacer, durante o después. En el caso de esos personajes: a Daenerys se lo dio su madre antes de su nacimiento, a Tyrion su padre y a Jon se lo dio Ned.
Como vemos no dice que Ned sea su padre, mientras que sí afirma que Tyrion es hijo de Tywin. Pero esta información pasó desapercibida hasta la confirmación en este último capítulo.